- El portero siempre es el más gordo.
- El partido nunca acaba en un tiempo establecido. Se acaba cuando todos están cansados.
- Da igual que un equipo vaya ganando 15-0. El partido siempre se termina con el «quien marca gana».
- No existe la figura del árbitro.
- Las únicas faltas que se pitan son las que terminan con alguien tirado por el suelo.
- No existe el fuera de juego.
- El dueño del balón no puede enfadarse. Si se enfada, adiós partido.
- Los dos más buenos nunca pueden jugar en el mismo equipo. Son quienes eligen.
- La barrera nunca está a la distancia reglamentaria.
- A algún vecino le caerás gordo y te dirá que no puedes jugar.
- El último elegido es el gran paquete.
- Son enemigos para siempre los jugadores del pueblo más cercano.
- Los más malos del equipo solo pueden jugar de defensas o palomeros.
- La portería está hecha con dos piedras o dos botellas. Nunca son del mismo tamaño.
- Apostar algo significa jugar una final.
- Impera la ley de la botella: quien la tira va a por ella.
- El equipo en espera de reta va por balones volados.
- Si hay penalti, el gordo va fuera y se pone el más bueno.
- Si no hay nadie que esté gordo, el portero es el más alto.